.... mi gran maestrÖ

 

… tuve el honor de estar ahí, a su lado,  guardando en cajas de cartón cada recuerdo, cada momento inolvidable que por ahí había dejado una huella, aguantando las ganas de soltar alguna lágrima al verlo tan triste y feliz a la vez; yo también lo estaba, por él,  por mi maestro de escuela  y de vida también… un gran amigo… un ser humano extraordinario,  porque hoy se despedía de una etapa maravillosa de su vida, hoy empacábamos juntos tantos años ahí vividos, tantas experiencias, tanto trabajo de años que hoy culminaba. Escuchando la música que desde entonces lo acompañaba y al mismo tiempo sus palabras quebrantadas por la tristeza pero compensadas con una gran sonrisa de júbilo, de éxito. Hoy fue su último día de labor y quise estar ahí porque seguro era un día importante, quería agradecerle todo lo compartido, porque todo cuanto sabía me lo enseñó y porque en algún momento se sentó a mi lado para escucharme  y regalarme un buen consejo, porque se esmera siempre en brindarme la seguridad para seguir adelante sin miedo a nada y de él aprendí que lo mas importante es intentar y estar dispuesto a  fracasar y levantarse.
 Su compañía siempre es como estar en casa, por eso y por tantas cosas lo admiro y le deseo lo mejor en esta nueva etapa de la vida, porque hay mucho por vivir y sé que lo hará bien. Deseo de todo corazón que sea feliz siempre y seguro que estaré allí para vigilar que así sea, con un abrazo,  con una sonrisa, con una buena charla… estaré ahí. Gracias por todo, por ser mi maestro, por permitirme estar ahí también y formar parte de esta etapa que hoy culmina. Gracias por todos los detalles que aunque se ven pequeños dentro de mí son muy grandes y seguro que no es una despedida pues siempre estaremos  aquí o allá, que si no viene yo iré, que Dios lo bendiga siempre.

En honor a mi maestro QFB. Javier Merino Zafra, hoy por ser su último día de labor, el día de su jubilación. Gracias por todo.